El vicepresidente de Estados Unidos, JD Vance, ha causado un gran revuelo en la Conferencia de Seguridad de Múnich con un discurso que ha dejado atónitos a los líderes europeos. En una intervención que ha sido calificada como "inaceptable" por el ministro de Defensa alemán Boris Pistorius, Vance declaró que "hay un nuevo sheriff en Washington bajo el liderazgo de Donald Trump".
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— Rapid Response 47 (@RapidResponse47) February 15, 2025
Lejos de centrarse en temas de seguridad internacional o en el conflicto en Ucrania, el vicepresidente estadounidense dedicó gran parte de su discurso a criticar duramente las políticas europeas sobre inmigración, libertad de expresión y valores democráticos. Vance afirmó que la mayor amenaza para Europa no proviene de Rusia o China, sino "desde dentro", acusando a los líderes europeos de alejarse de sus valores fundamentales].
El discurso de Vance ha sido interpretado como un giro radical en la política exterior estadounidense. Kaja Kallas, jefa de política exterior de la UE, sugirió que Vance estaba "buscando una confrontación" con Europa, que incluye a algunos de los aliados más cercanos de Estados Unidos..
Entre las críticas más controvertidas, Vance arremetió contra la cancelación de las elecciones en Rumanía en diciembre de 2024, que fueron anuladas por el tribunal supremo del país tras acusaciones de injerencia rusa. El vicepresidente estadounidense desestimó las preocupaciones sobre la desinformación, describiéndolas como "feas palabras de la era soviética".
La intervención de Vance también incluyó duras críticas a las políticas migratorias europeas, haciendo referencia a un reciente ataque con coche en Múnich, presuntamente perpetrado por un solicitante de asilo afgano. "¿Cuántas veces tenemos que sufrir estos terribles reveses antes de cambiar de rumbo y llevar nuestra civilización compartida en una nueva dirección?", cuestionó.
La reacción europea ha sido de estupor y rechazo. El presidente alemán Frank-Walter Steinmeier dejó claro que la relación de Berlín con Washington se ha deteriorado considerablemente desde el regreso de Trump al poder. "La nueva administración estadounidense tiene una visión del mundo muy diferente a la nuestra", afirmó Steinmeier.
Este incidente marca un punto de inflexión en las relaciones transatlánticas y sugiere un futuro incierto para la cooperación entre Estados Unidos y Europa en temas cruciales como la seguridad internacional y la lucha contra el cambio climático. La declaración de Vance sobre el "nuevo sheriff" parece indicar que la administración Trump está dispuesta a adoptar un enfoque más confrontacional con sus aliados tradicionales, priorizando una agenda doméstica conservadora sobre la diplomacia internacional.
