En el proyecto El Futuro es Energía, presentado por las organizaciones Demos Lab, Democracia Digital y Talento para el Futuro en el Congreso de los Diputados, los jóvenes han subrayado la importancia de que la transición hacia un modelo energético sostenible sea accesible para todos los sectores de la sociedad, especialmente los más vulnerables. La macroencuesta, en la que participaron más de 8.000 jóvenes, refleja una preocupación por garantizar que el cambio hacia las energías limpias no deje atrás a nadie, y que los hogares más vulnerables puedan beneficiarse de las ventajas de tecnologías renovables sin que el coste sea una barrera.
Los expertos han complementado estas preocupaciones juveniles con propuestas claras para asegurar una transición energética justa, proporcionando subvenciones, créditos asequibles y políticas de fiscalidad que garanticen que el acceso a las energías limpias sea una realidad para todos.
Propuestas para asegurar una transición justa para los más vulnerables
Una de las principales demandas de los jóvenes es la implementación de subvenciones y créditos a bajo interés que faciliten a los hogares vulnerables la adopción de tecnologías limpias, como paneles solares, bombas de calor y vehículos eléctricos. Los expertos coinciden en que este apoyo financiero es fundamental para garantizar que las familias más afectadas por la pobreza energética puedan acceder a soluciones que les permitan reducir sus facturas energéticas y mejorar su calidad de vida.
Además, se propone una fiscalidad adaptada para que las energías limpias sean más accesibles a los colectivos vulnerables, haciendo que los incentivos fiscales favorezcan la adopción de tecnologías renovables. Los expertos también destacan la necesidad de facilitar la rehabilitación energética de las viviendas, impulsando mejoras en el aislamiento térmico y la eficiencia energética para reducir el consumo de electricidad y las facturas.
Certidumbre para la industria en la transición energética
El proyecto El Futuro es Energía también aborda la importancia de garantizar una transición energética asequible y sostenible para la industria. Los expertos proponen la promoción de contratos a largo plazo (PPAs) entre empresas y generadores de energías renovables, que proporcionen certidumbre en los costos energéticos para el sector industrial. Estos contratos ayudarían a estabilizar los precios de la energía a largo plazo, beneficiando tanto a las empresas como al sistema energético en su conjunto.
Este enfoque no solo reduciría el riesgo económico para la industria, sino que también fomentaría un mayor uso de fuentes de energía renovable en el tejido productivo del país, ayudando a descarbonizar la economía de manera más efectiva.