Rufián recalca al presidente que la Generalitat «no es la Liga» y que sólo ERC puede gobernar Cataluña
MADRID, 24 (EUROPA PRESS)
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha pedido este miércoles a Junts que asuma su «derrota» en las elecciones catalanas del 14 de febrero en lugar de «apropiarse» de «triunfos ajenos» y que apueste por el diálogo el lugar de agitar el 51%, que es el apoyo que recibieron las fuerzas independentistas. «Es el momento de pasar página», ha proclamado Sánchez en el Congreso, recalcado que los comicios no fueron un «plebliscito».
Durante su intervención en el Pleno, Sánchez ha recordado que en las elecciones catalanas ganaron las fuerzas que «apuestan por el diálogo» para subrayar que sería bueno que se reconociera esa voluntad de encuentro y consenso con un Gobierno liderado por quien ganó esa cita con las urnas, esto es, el socialista Salvador Illa.
Enseguida, desde ERC Gabriel Rufián ha reaccionado para dejar claro al presidente que la Generalitat no es «una liga, Roland Garros o la Champions» y que no la gobierna quien gana las elecciones, recalcando que, tras los comicios catalanes, sólo su partido puede hacerlo.
Dirigiéndose a Junts, quien previamente le había emplazado a dar una respuesta a ese 51% de los catalanes que han optado por la independencia, Sánchez ha cuestionado que el partido que lidera Carles Puigdemont pida cuentas como si hubiera ganado las elecciones y que siga agitando el apoyo cosechado por las fuerzas secesionistas como si el 14F hubiera sido un plebiscito.
«Y QUE PASEN PÁGINA»
«Lo que la ley democrática no permite no lo van a conseguir ustedes retorciendo las matemáticas», ha manifestado el presidente antes de reclamar a Junts que deje de «imponer» su visión de Cataluña y recalcarle que el 14F en esa comunidad ganaron aquellas fuerzas que abogan por el encuentro y por «una salida de izquierdas» a la crisis.
«En algún momento tendrán que pasar página», ha comentado a Junts, a cuya portavoz, Miriam Nogueras, le ha recomendado que, para empezar, «asuma su derrota en vez de apropiarse de triunfos ajenos» y entienda la necesidad de gestionar los problemas reales de los ciudadanos y de apostar por el diálogo en lugar de continuar por la senda de la «ruptura».
