La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Tudela, en sesión celebrada este viernes ha acordado proponer como ‘Zonas Acústicamente Saturadas (ZAS)’ las calles Herrerías, Bóveda y Mercadal, tras verificar que se superan los umbrales establecidos en la ordenanza municipal de ruidos, según se desprende del resultado del estudio acústico, de fecha 10 de abril de 2024, que ha llevado a cabo la empresa ID Ingeniería Acústica S.L
Concretamente, las dos zonas a declarar como ‘ZAS’ son Mercadal-Bóveda, que abarca entre los números 1 y 12 de la plaza Mercadal y el número 4 de la calle Bóveda, y Herrerías, que comprende entre el número 38 de esta calle y el número 1 de la calle zurradores, ambos incluidos.
Según el estudio acústico, en todos los puntos de evaluación de la zona Mercadal-Bóveda se superan entre los 5,7 y los 8 dBA los valores límite para declaración de ZAS y en la zona de Herrerías esta superación se da en 3 de los 4 puntos de evaluación y oscila entre los 0,1 y los 3,3 dBA.
En este sentido, como medidas a adoptar, el Ayuntamiento de Tudela no concederá nuevas licencias de actividades potencialmente ruidosas en dichas zonas y llevará a cabo una campaña de concienciación sobre la problemática existente.
Además, se abre un periodo de información pública de 30 días naturales para que los interesados puedan presentar alegaciones.
‘ZAS’ e inicio del procedimiento
La ‘Ordenanza municipal de protección del medio ambiente urbano contra la emisión de ruidos y vibraciones’ define como ‘Zonas Acústicamente Saturadas (ZAS)’ aquellas en las que se producen unos elevados niveles sonoros debido a la existencia de numerosas actividades recreativas, espectáculos o establecimientos públicos, a la actividad de las personas que los utilizan así como a cualquier otra actividad que incida en la saturación del nivel sonoro de la zona.
En base a ello, mediante acuerdo de Pleno de fecha 30 de enero de 2023, el Ayuntamiento de Tudela inició el procedimiento para la declaración como ‘Zona Acústicamente Saturada’ en estas calles, motivado por la concentración de gran cantidad de locales de ocio, su afección acústica y las múltiples quejas de los vecinos.