El Gobierno de Navarra, a través de la Comisión Interdepartamental de la Lucha contra la Despoblación, ha consolidado su compromiso de combatir el reto demográfico con un enfoque innovador, transversal y sostenible, ha definido nuevas líneas estratégicas y ha reforzado las iniciativas enmarcadas en la Estrategia de Lucha contra la Despoblación de Navarra, considerada un modelo de planificación integral.
La Comisión Interdepartamental de la Lucha contra la Despoblación se reunió en fechas recientes, presidida por la Presidenta de Navarra, María Chivite.
La despoblación es uno de los grandes retos a los que se enfrenta la Comunidad Foral. Está reflejado en el Acuerdo de Legislatura y es prioritario para lograr una mayor cohesión social y territorial. La Comisión Interdepartamental del Gobierno de Navarra ha reforzado su estrategia frente a la despoblación con la aprobación del Plan Operativo Anual de 2025, en el que se han presupuestado 171,5 millones de euros para la lucha contra la despoblación, un 17% más que en 2024.
Tal y como explica el director general de Administración Local y Despoblación, Jesús Mari Rodríguez, “en Navarra hemos hecho una apuesta decidida por la lucha contra la despoblación. El objetivo es incorporar la perspectiva demográfica a la legislación, con la variable de despoblación como elemento de inclusión. Los pueblos no sólo son origen y patrimonio. Son mucho más. Son la clave para el futuro”.
La Comisión Interdepartamental continuará trabajando en 2025 en la implementación del Plan Plurianual de Lucha contra la Despoblación, garantizando el seguimiento y evaluación de las medidas adoptadas para asegurar su impacto positivo. Todo con el objetivo de promover la igualdad de oportunidades y derechos para toda la ciudadanía navarra, independientemente de su lugar de residencia.
Entre los proyectos nuevos que se impulsarán desde la Oficina Técnica de Lucha contra la Despoblación, en colaboración con las direcciones generales, destacan, entre otros, un programa específico de acceso a la vivienda rural, con diagnóstico sobre la oferta y la demanda para facilitar el acceso a la vivienda en áreas rurales; un indicador multidimensional de despoblación, una herramienta para realizar diagnósticos municipales detallados y orientar políticas basadas en datos concretos, el estudio sobre la población temporal, que consistirá en el análisis del impacto de la población flotante en zonas rurales para optimizar servicios y diseñar medidas adaptadas; una guía práctica para la inclusión de la variable despoblación, que garantizará que todos los planes públicos consideren el impacto demográfico; un sistema de acogida para población migrante, consistente en el diseño de un protocolo homogéneo para integrar a las personas migrantes en comunidades rurales, y un plan foral por los cuidados en el ámbito rural, que para la mejora de la conciliación y el fomento de la igualdad en municipios en riesgo de despoblación.
Ley Foral de Despoblación y Desarrollo Rural
La nueva Ley Foral busca integrar las medidas actuales en un marco normativo que permita combatir de forma más eficiente la despoblación, con la inclusión de perspectivas transversales como género, clima y juventud. Además, se prevé incorporar un fondo de vertebración territorial que permita implementar políticas diferenciadas en favor de las zonas rurales desfavorecidas.
Entre las propuestas, destaca la discriminación positiva hacia áreas rurales, medidas de simplificación administrativa, estímulos para el emprendimiento y el relevo generacional, y mejoras en vivienda, transporte, conectividad y servicios básicos.
El proceso de redacción de esta Ley se basa en una amplia consulta previa que incluye un diagnóstico inicial, reuniones con agentes sociales y territoriales, y aportaciones recogidas a través de la plataforma Participa Navarra. La participación activa de grupos locales, ayuntamientos y organizaciones sectoriales asegura que la nueva normativa responda a las necesidades reales del territorio.
“Solo conseguiremos avanzar en esta materia gracias a un abordaje conjunto de los problemas y de las necesidades detectadas. Solo lo haremos si somos capaces de establecer un modelo de gobernanza basado en la cooperación interadministrativa”, expone Jesús Mari Rodríguez, director general de Administración Local y Despoblación.
La despoblación afecta al 60% de los municipios navarros y supone un desafío que sólo puede abordarse mediante una colaboración interinstitucional y territorial. La Estrategia de Lucha contra la Despoblación de Navarra se estructura en torno a seis ámbitos clave y 25 ejes de actuación que buscan establecer condiciones sociales, económicas y territoriales para revitalizar las zonas más afectadas. Este enfoque transversal, aunque complejo, es fundamental para garantizar un desarrollo equilibrado y sostenible en todo el territorio.
