Navarra Norte

UGT se personará en un juicio para determinar si 200 ‘riders’ navarros son trabajadores por cuenta ajena

El sindicato asegura que el Estado pierde 76 millones en cotizaciones y los trabajadores 92 millones en salarios con estas plataformas PAMPLONA, 18 (EUROPA PRESS) UGT se personará en un juicio en el Juzgado de […]

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El sindicato asegura que el Estado pierde 76 millones en cotizaciones y los trabajadores 92 millones en salarios con estas plataformas

PAMPLONA, 18 (EUROPA PRESS)

UGT se personará en un juicio en el Juzgado de lo Social número 1 de Pamplona para determinar si 200 ‘riders’ de Glovo en Navarra son trabajadores por cuenta ajena.

Así lo ha anunciado en rueda de prensa Amaia Villanueva, secretaria general de la Federación de Servicios, Movilidad y Consumo de UGT de Navarra, y Rubén Ranz, responsable confederal del sector de Plataformas Digitales de UGT.

Según ha explicado Villanueva, hace unos meses, 200 repartidores de Glovo recibieron un mensaje en sus móviles de la Seguridad Social diciendo que les iban a dar de alta como trabajadores por cuenta ajena. Al mismo tiempo, han sido citados como codemandados por el Juzgado de lo Social número 1 de Pamplona porque la inspección de Trabajo había determinado que «eran trabajadores por cuenta ajena». Un juicio del que todavía no conocen la fecha pero en el que el sindicato va a personarse.

En este sentido, Villanueva ha lanzado un mensaje a los ‘riders’ para decirles que «no están solos» ya que «el sistema de trabajo es muy individualista y no tienen relación con el resto de sus compañeros». Así, ha destacado que «estamos dispuestos para ayudarles y echarles una mano contra esas plataformas y su modo de trabajo». Ha remarcado que en «prácticamente la totalidad de los juicios» que se han celebrado en el conjunto del país «hemos demostrado que son trabajadores por cuenta ajena».

Por su parte, Rubén Ranz ha destacado que todo surge a raíz de una demandad de UGT en diciembre de 2017 ante la inspección de Trabajo contra estas plataformas y ha señalado que «todavía se están celebrando juicios en diferentes provincias». Ha resaltado que «todas las inspecciones han determinado que hay una relación laboral» y ha reconocido que la labor de la inspección de Trabajo es «bastante difícil» porque «el jefe es muy intratable y no le conoces y además no existen centros de trabajo como tal».

Según ha explicado, UGT ha hechos dos informes sobre esta cuestión. Uno de ellos sobre el trabajo en las plataformas digitales según el cual el Estado está dejando de ingresar 76 millones de euros en cotizaciones y los trabajadores 92 millones en salarios; lo que permite que estas plataformas sean «extremadamente rentables».

En este sentido, ha destacado que Glovo «es una plataforma de transporte que no tiene ni un sólo vehículo» ya que son los trabajadores «los que tiene que poner el vehículo, la línea de teléfono con un smartphone» y es una estructura que «no necesita una implantación con un centro de trabajo».

«Hemos podido demostrar que el mito de la flexibilidad de la que hacen gala las plataformas digitales no existe, lo que hay es una presencia constante de la gente en la calle y lo peor se ha visto en la pandemia que han sido declarados servicios esenciales y muchos de ellos se han contagiado», ha criticado Ranz.

Además, ha censurado que en este escenario las plataformas han bajado los precios de los pedidos a la vez que han subido los precios a los establecimientos para «aumentar sus beneficios». «Es una barbaridad que este sistema permita el beneficio de las plataformas a costa de la explotación de los trabajadores», ha censurado. A este respecto, ha afirmado que en este momento hay pedido por 1,30 euros, a lo que hay que descontar los gastos del trabajador por mantenimiento, IVA o autónomos.

Rubén Ranz ha asegurado que las plataformas se resisten a que los ‘riders’ sean considerados trabajadores por cuenta ajena porque «necesitan en todo momento poder manejar los precios» y «si tienen unos costes fijos de salarios no pueden manejar los precios».

En un segundo informe, el sindicato aborda un «fraude masivo» a través del sistema de las «cuentas alquiladas» por el cual un usuario duplica su cuenta para que otra persona trabaje con ella y percibe un porcentaje de las ganancias.

Ranz ha explicado que estas plataformas funcionan con un sistema que «premia la presencia constante y no rechazar ningún pedido» lo que «me obliga a estar constantemente en la calle». Así, ha destacado que «se ha juntado una tormenta perfecta» con trabajadores migrantes a los que «han dado asilo por razones humanitarias» y su permiso «les dice que no pueden trabajar en régimen general», de forma que «la única forma de trabajar es con el modelo de autónomos». Una situación «muy beneficiosa para las plataformas», ha resaltado el representante de UGT, que ha subrayado que se han dado casos de «gente que está trabajando de manera ilegal» a través de cuentas alquiladas.

Sobre la situación en la mesa de diálogo social a nivel estatal sobre esta cuestión, ha señalado que es «un tanto complicada» porque no se haya «profundizado más» después de más de 11 reuniones. Así, ha destacado que hay más de 4.000 empresas que se establecen como plataformas digitales, que no son sólo de reparto de comida, sino de cuidados, servicios médicos, financias o conductores de camiones. Sin embargo, ha criticado que el Ministerio «ha querido enfocarlo exclusivamente» en el tema de los ‘riders’.

En este sentido, ha indicado que la propuesta se «ha dividido en dos». Por un lado, un Real Decreto con los «aspectos más importantes» fijados por el Tribunal Supremo. Sin embargo, ha criticado que no se haya abordado el acceso de los sindicatos a los algoritmos laborales que manejan estas plataformas con los que, ha opinado, «seguramente se esté vulnerando los derechos de las personas». Un aspecto, el del algoritmo, que «lo deja en un anteproyecto que hay que llevar al Congreso» y que «no saben ni cómo ni cuándo va a salir».

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