El pasado 13 de febrero, el Gobierno de Navarra homenajeó en el Baluarte a un grupo de 41 personas y les reconoció como víctimas de la violencia de la ultraderecha, o de comportamientos impropios de funcionarios públicos, en Navarra, aplicando el “Protocolo de Estambul” que dota de credibilidad al relato de malos tratos, tortura, o trato vejatorio, degradante y humillante, inhumano al fin y al cabo, y reconociendo, oficialmente así, que también en Navarra sucedió.
Algunos de los que allí estuvimos echamos en falta que se les nombrase a todas y cada una, y verles subidas en el escenario para darles un cálido aplauso, y mostrarles, así, nuestra empatía y cercanía. Se les pidió perdón oficialmente porque ”nunca debió haber sucedido” lo que les ocurrió. No fueron víctimas de un accidente sino de un comportamiento elegido por otras personas que se comportaron como esbirros al servicio de un Estado que al arrogarse para sí el “monopolio de la violencia” muestra su cara amenazadora.
La violencia no es inherente al ser humano;la violencia deshumaniza al que la ejerce.
La compasión, la empatía, la cercanía, el cuidado del semejante, nos humanizan y civilizan creando las bases para una convivencia pacífica y armoniosa, y construyendo un entorno colaborativo.
En el Partido Carlista-EKA de Navarra, esperábamos que Ricardo García Pellejero y Aniano Jiménez Santos, asesinados el 9 de mayo de 1976 en la fiesta del Partido Carlista, en Montejurra, estuviesen incluidos, “de oficio” entre los homenajeados, por lo público, notorio y evidente de su caso ya que cumplen con los requisitos de ser víctimas de la violencia ultraderechista y de comportamientos impropios de funcionarios públicos, en Navarra. La sentencia de la Audiencia Nacional de noviembre de 2003 que les reconoce como víctimas del terrorismo, señala a la ultraderecha “CT” como autora de los asesinatos. Ya sabíamos, y ahora está corroborado por documentos con membrete oficial del Gobierno civil de Navarra, de 1976, que aquel ataque terrorista contra el Partido Carlista contó con la organización y financiación del Ministerio de la Gobernación del Gobierno central franquista de Arias Navarro, y a cuyo frente estaba Manuel Fraga Iribarne, junto con varios Gobiernos civiles. Aniano y Ricardo, y al menos una treintena de heridos que sepamos, no fueron víctimas de un accidente, ni resultado de una “pelea entre hermanos”; esa versión franquista de lo que ocurrió en Montejurra´76 es falsa, y tampoco debió haber sucedido nunca. Aniano y Ricardo fueron víctimas de la ultraderecha española e internacional, que fue a la fiesta del Partido Carlista a reventarla, organizada y con armas de guerra, para delinquir atacando al Partido Carlista.
Aniano y Ricardo no fueron incluidos en el primer grupo de 12 homenajeados el 29-V-2024, y por eso el Partido Carlista-EKA de Navarra estuvo a las puertas del Baluarte con una pancarta reivindicando su memoria; tampoco lo han sido en este segundo grupo, y por eso volvimos a estar en las puertas del Baluarte este pasado 13 de febrero con la pancarta reivindicativa de su memoria.
A raíz de una comparecencia del Partido Carlista-EKA de Navarra el 24-I-2023, en una sesión de trabajo de la Comisión de Relaciones Ciudadanas del Parlamento navarro, ésta acordó el 28-II-2023, instar al Gobierno de Navarra a reconocer también al Partido Carlista como “víctima de la violencia de la ultraderecha, y de comportamiento impropio por parte de funcionarios públicos”, en Navarra, pero no lo ha hecho porque la Ley de Memoria histórica de Navarra sólo reconoce a personas físicas como víctimas, no incluye a personas jurídicas; la Ley de Memoria Democrática estatal sí lo hace; da la impresión de que la Ley navarra, en esto, se queda corta, y se podría corregir.
El Partido Carlista-EKA de Navarra se une a todas las voces que piden “Verdad, Justicia, Reparación”, así como la “Desclasificación” de la documentación oficial existente y amparada en una Ley de Secretos Oficiales, franquista de 1968, que no contó con el apoyo de los Procuradores Carlistas en aquellas Cortes, para que los ciudadanos que componemos la sociedad navarra tengamos más datos que nos acerquen a la verdad de un pasado falseado oficialmente, como la mejor garantía para que ese pasado que “nunca debió suceder” y ese “comportamiento impropio” no se vuelvan a repetir. Se hace camino al andar.
Pamplona/Iruña, 18 de febrero de 2025
Jesús Mª Aragón Samanes. Secretario General del Partido Carlista-EKA de Navarra