Pamplona-Iruña, 25 de junio 2020
La iniciativa es una respuesta a una de las mayores demandas ciudadanas de los últimos años y se da un empujón crucial a la revitalización del Casco Antiguo.
Cumpliendo con uno de los compromisos de legislatura más demandados por la ciudadanía, en los próximos días dará comienzo el despliegue de fibra óptica por el Casco Histórico de la ciudad.
De esta forma, el Ayuntamiento de Tudela desbloquea una iniciativa que llevaba paralizada desde 2014. Supondrá que todos los vecinos de la capital ribera tengan acceso y estén conectados sin diferencias, algo que no ocurría hasta ahora y que creaba una situación de desventaja en la que negocios y vecinos del Casco Viejo se veían limitados, y por la que muchos otros proyectos de implantación en la zona se frenaban en seco.
El despliegue tendrá lugar durante el verano con la intención de que en septiembre, coincidiendo con el inicio del curso escolar y la actividad post-estival, los vecinos puedan tener acceso al servicio.
Para el alcalde Alejandro Toquero, “la ejecución de este proyecto era un compromiso muy personal de este equipo de Gobierno Municipal que desde antes de llegar al Ayuntamiento se planteó como un asunto prioritario y estratégico”. No en vano, solo el año pasado, se presentaron en el registro 523 firmas reivindicando este servicio. Además, la crisis del covid-19 ha puesto más de relevancia los problemas que suponía el no acceso a la fibra en esta zona a la hora de poder seguir con el trabajo telemático o con las clases online de los escolares y el alumnado de Escuela de Idiomas y similares.
Hoy se ha hecho público un Bando de Alcaldía en el que se da aviso a los vecinos de esta zona de la ciudad del despliegue y que pide su colaboración para que se facilite y autorice el cableado a los operarios del grupo Masmóvil Broadmand SAU. De hecho, la colaboración ciudadana es fundamental para que el despliegue se lleve a cabo con éxito ya que, aunque parte del cableado será soterrado o utilizando las canalizaciones de alumbrado público que ya lo estén, en zonas específicas, requerirá ser aérea, es decir, por fachada. En este último caso, se minimizará al máximo el impacto visual aprovechando los patios interiores, posibles cambios en de material en las fachadas, retrocesos u otros cableados, siempre bajo la supervisión de los servicios técnicos municipales.
