Navarra Sur

Pueyo visita su depuradora en una jornada de puertas abiertas con actividades infantiles

La Consejera Isabel Elizalde ha recorrido la instalación acompañada de la alcaldesa, Nekane Salaberria, y del presidente de la mancomunidad de Mairaga, Pedro Leralta Todos los vecinos de Pueyo han podido acudir a la depuradora […]

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La Consejera Isabel Elizalde ha recorrido la instalación acompañada de la alcaldesa, Nekane Salaberria, y del presidente de la mancomunidad de Mairaga, Pedro Leralta

Todos los vecinos de Pueyo han podido acudir a la depuradora de la localidad en una jornada de puertas abiertas que ha contado con la visita oficial por la mañana de la Consejera de Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Administración Local del Gobierno de Navarra, Isabel Elizalde, mientras que por la tarde han tenido lugar juegos infantiles y recorridos guiados por la instalación para las personas adultas. Elizalde ha estado acompañada de la alcaldesa de Pueyo, Nekane Salaberria, y del presidente de la mancomunidad de Mairaga, Pedro Leralta, así como de Iñaki Urrizalki, gerente de NILSA, empresa pública responsable de la depuración y saneamiento en Navarra. En el acto, NILSA ha presentado su memoria anual corporativa, en la que figuran las cuentas tanto de la entidad como del Plan Director de Saneamiento de los Ríos en Navarra.

El informe anual del plan refleja que durante 2017 se ejecutaron 5.785.025,23 euros en obras, obras que supusieron la finalización de las instalaciones de Lantz, Liédena, Pueyo, Lizarraga-Ergoiena, y el inicio de los proyectos de Ziordia y la mejora del tanque de tormentas de Tudela. Además, el año pasado, también se licitaron los proyectos de Salinas de Oro, Ezcároz (emisario), Urdax (conexión de barrios Leorla e Hiribere) y Cursos Bajos del Urederra. Por otra parte, se redactaron los de Villanueva de Aezkoa, Errazkin, Baraibar (segunda fase), Aróstegui, Oroz-Betelu, Arano, Meoz, la modificación del emisario de Monteagudo, la renovación del emisario y tanque de retención de Valtierra, la reforma de la depuradora de Fitero, y mejoras de tratamiento en Corella, Baztan, Cortes, así como en los emisarios de Bajo Arga y en los colectores de Ultzama (tercera fase).

En cuanto a los gastos de operación y mantenimiento de las instalaciones -141 depuradoras y casi medio millar de fosas sépticas distribuidas por toda la geografía navarra-, ascendieron a 13.133.268,12 euros, de los cuales, 7.316.442,67 euros fueron gestionados directamente por NILSA y el resto por la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona (4.772.201,33 euros) y la de Montejurra (1.044.724,12 euros). Si bien el plan director es responsabilidad de NILSA, estas dos entidades locales se responsabilizan del funcionamiento de las instalaciones que se encuentran en su ámbito y repercuten sus costes al plan director.

El plan director está dotado con un impuesto que pagan todos los contribuyentes a través del recibo del agua y que se denomina canon de saneamiento. Durante 2017, recaudó 30.405.067 euros. Las tarifas de tratamiento son de 0,5970 €/m³ para las familias y de 0,7150 €/m³ para los usos no domésticos, como el industrial. Durante 2018 estas tarifas no han experimentado ninguna subida.

En cuanto a los caudales tratados ascendieron a 75.657.875 metros cúbicos de agua residual, cifra inferior a la de 2016: 78.449.268 metros cúbicos. En 2015 habían sido 78.522.998 metros cúbicos, lo que supone una tendencia a la baja sostenida desde el último lustro. Se trata de una buena noticia porque supone que el consumo de agua ha descendido debido a mejores prácticas: tanto en los hogares (con ahorro de agua) como en las redes municipales, que han desdoblado en muchos casos las aguas fecales de las pluviales. Esto significa que el agua de lluvia ya no va a parar a las instalaciones gracias al aumento de las redes separativas en las localidades y, por tanto, no debe ser depurada un agua que, al ser de precipitaciones y no de uso humano, está limpia. Si todas las redes municipales fueran separativas, únicamente habría que tratar las aguas fecales y es el objetivo ideal al que debería tender cada municipio.

En la actualidad, las instalaciones están preparadas para admitir un caudal conjunto anual de 205.565.850 metros cúbicos, lo que supone que futuros desarrollos poblacionales, industriales, urbanísticos, etcétera, pueden ser admitidos en la red de saneamiento sin requerir dotaciones de infraestructuras nuevas o tener que ampliar las actuales.

En el apartado de Investigación y Desarrollo, NILSA ha asumido retos derivados de los avances tecnológicos -que han puesto el punto de mira en los llamados contaminantes emergentes-; de la creciente movilidad global -que está introduciendo nuevos riesgos sanitarios-; y del cambio hacia una economía circular -que incide en la necesidad de reintroducir materia orgánica y elementos nutrientes en el medio natural-. Dentro de este marco, desarrollamos tres líneas de investigación durante 2017:

· Sistemas de drenaje sostenible: para disminuir el aporte de aguas de lluvia a las redes de saneamiento urbanas.

· Retirada de nitrógeno y fósforo de las aguas efluentes de las depuradoras: con el objetivo de minimizar el impacto de las mismas especialmente en situaciones de elevadas temperaturas.

· Dentro de la estrategia de economía circular se encuentran dos líneas: recuperación de fósforo en lodos de depuradoras y mejora de la calidad de los lodos que se utilizan como fertilizante en suelos.

Por otra parte, cabe destacar que Navarra obtuvo el año pasado 6,6 millones de euros en proyectos POCTEFA a través de 24 propuestas. Uno de ellos, POCTEFA OUTBIOTICS, recayó en NILSA, en colaboración con la Universidad de Zaragoza. El objetivo es identificar la presencia de antibióticos en aguas y residuos, para lo que se investiga en tecnologías innovadoras para el diagnóstico, prevención y eliminación de los mismos, principalmente los de origen animal. Además, en el marco de los proyectos europeos, NILSA participa también en LIFE NADAPTA, el primer proyecto europeo de adaptación al cambio climático. Los trabajos en este caso se centran en el tratamiento y valorización agronómica de residuos orgánicos y la recuperación de fósforo de aguas residuales por precipitación.

En la primera opción, se operan instalaciones piloto de compostaje de lodos, restos de alimentos y estiércoles, con el objetivo de evaluar las ventajas e inconvenientes de la utilización de los distintos productos fertilizantes obtenidos a partir de materia orgánica, adaptar las buenas prácticas agrarias y coordinar la estrategia de gestión de materia orgánica procedente del sector público con las necesidades del sector agrario. En la recuperación de fósforo de aguas residuales, los trabajos se centran en una planta piloto de precipitación de estruvita para la obtención de fósforo a partir del tratamiento de lodos en la depuradora de Tudela.

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