El Departamento de Salud del Gobierno de Navarra ha abierto la opción de vacunación de la segunda dosis de refuerzo de COVID-19 (4ª en total) a la población general menor de 60 años sin riesgo, aunque ha insistido en la importancia de «incrementar las coberturas» en determinados tramos de edad definidos como prioritarios como son los que van de 60-79 años, donde «todavía queda un considerable porcentaje sin vacunar (un 37% de la población diana) y están más expuestos a contagios con ingreso».
Navarra -que tiene un nivel de protección e inmunización superior a la media estatal- canaliza así la aplicación de la última actualización acordada en la Comisión de Salud Pública del Consejo Interterritorial que coincide, además, con un periodo invernal «siempre más favorable a la circulación de virus respiratorios, incluida la gripe, contra los que es conveniente incrementar la inmunización».
Esta fase de vacunación, que complementa e intensifica la campaña iniciada en octubre, tendrá lugar en los centros de salud previa cita online a través de la Carpeta de Salud, ha explicado el Ejecutivo foral.
Salud ha recordado en todo caso la importancia de mantener medidas de prevención y protección (uso de mascarilla y evitar en la medida de lo posible el contacto con personas vulnerables en caso de síntomas, etc.) para evitar la propagación de virus respiratorios en estas fechas de «notable movilidad e interrelación social», así como realizar un «uso adecuado» de los recursos sanitarios en función de las necesidades.
NECESIDAD DE INCREMENTAR LA COBERTURA EN TRAMOS PRIORITARIOS
La estrategia y prioridades de la vacunación contra la COVID-19 siguen siendo las ya conocidas y puestas en práctica, por lo que el Departamento de Salud insiste en la importancia de incrementar las coberturas en determinados tramos de edad definidos como prioritarios como el que va de 60-69 años y de 70-79 años donde todavía hay más de un 46% de personas y cerca de un 26,3%, respectivamente, sin esta protección, y en personas menores de 60 años con enfermedades y/o condiciones crónicas, así como mujeres embarazadas y convivientes de personas con alto grado de inmunosupresión.
No obstante, para aplicar una reciente actualización abordada en los espacios técnicos del Consejo Interterritorial y una vez garantizada la disponibilidad de dosis para los grupos prioritarios, también han habilitado huecos en las agendas en los centros de salud para que quien lo solicite y no pertenezca a los grupos preferentes por edad, situación sanitaria (inmunodeprimidos, etc.) o profesional, pueda recibir una dosis más de refuerzo de la vacuna contra la COVID-19 por razones administrativas (viajes, requisitos de residencia, etc) o la propia voluntad de la población siempre que no haya una contraindicación clínica, algo que se circunscribe a situaciones muy concretas.
Asimismo -según la última actualización de la estrategia de vacunación- también se abre la opción -y en este caso ya como recomendación- a recibir esta protección contra la COVID-19 a un nuevo grupo muy reducido como son los menores de entre los 6 meses a los 5 años con determinadas condiciones de riesgo: trasplante de progenitores hematopoyéticos; trasplante de órgano sólido; fallo renal crónico; personas con infección por VIH con bajo recuento de CD4; inmunodeficiencias primarias combinadas y de células B; tratamiento inmunosupresor con inmunomoduladores biológicos; cáncer de órgano sólido o hematológico en tratamiento con quimioterapia citotóxica u otros tratamientos que conlleven elevado riesgo de progresión a formas graves de COVID-19 que requieran hospitalización o causen el fallecimiento. Este grupo de riesgo -muy limitado e identificado por su tipología- será contactado desde el propio sistema sanitario con el que mantienen una relación habitual.
EL 68,2% DE LOS MAYORES DE 60 AÑOS TIENEN LA SEGUNDA DOSIS
Según datos provisionales de la actual campaña de vacunación combinada de gripe y COVID-19, el 73,1% de la población diana mayor de 60 años ya cuenta con una dosis contra la gripe mientras que en el caso de la COVID-19, en la que rigen limitantes según el protocolo como el que hayan transcurridos 5 meses del contagio, se alcanza el 68,2%. Hasta el 27 de diciembre se han inoculado 132.839 vacunas frente a la COVID-19 y 164.075 contra la gripe como fruto de la fase más general de la campaña en la que también se han utilizado puntos centralizados de vacunación.
La vacuna de la gripe también se podrá seguir dispensando todavía a demanda de los pacientes en función de las disponibilidades de dosis aunque la campaña invernal general ya ha terminado.
Ahora, Navarra, en coordinación con otras autonomías y el propio Ministerio, ha decidido dar este nuevo paso con la vacuna de la COVID-19 una vez garantizadas unas coberturas notables en las dos líneas preferentes de vacunación invernal y contar con disponibilidad de dosis. En octubre se ofreció de manera simultánea la protección contra la COVID-19 y la gripe en los tramos de más edad y la respuesta social ha sido importante.
En el caso de la gripe, más del 87,5% de los mayores de 80 años ya tiene la dosis, lo mismo que el 81,3% del tramo 70-79 años, dos de las cohortes de edad con mayor riesgo de contagio e ingreso. En el caso del tramo 60-69 años la cobertura frente a la gripe baja al 59% por lo que desde Salud se insiste hacia este grupo en la importancia de haberse vacunado de la gripe y, sobre todo, hacerlo también ahora contra la COVID-19 ya que aquí el índice de cobertura es del 54 %, un índice superior a la media estatal pero aún mejorable. Como sucede con la gripe en los siguientes tramos etarios la cobertura frente al COVID-19 sube al 73,7% (70-79 años) y 66,7% (mayores de 80), porcentajes por encima de la media estatal.
CÓMO CONSEGUIR CITA
La cita se gestionará a demanda de la ciudadanía y preferentemente por internet (a través de la Carpeta Personal de Salud) algo que se puede realizar entrando en la web de Osasunbidea e ir desde la Carpeta de Salud a ‘citas’ – ‘citas campaña de vacunación’- según los procedimientos habituales.
Las vacunas existentes hasta ahora han contado con una efectividad «moderada» en la prevención de los contagios, pero han tenido un «papel fundamental para reducir la gravedad de la infección, el riesgo de hospitalización y la posibilidad de desarrollar cuadros graves». Según los informes del Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra, las personas correctamente vacunadas que contraen la infección tienen un 90% menos de probabilidad de ingreso hospitalario según todos los estudios disponibles y como se reitera cada semana en el Boletín Epidemiológico del INSLP.
El Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra aconseja combinar la vacunación frente a la COVID-19 y la gripe con otras medidas preventivas que tienen que ver con el uso de mascarillas en determinados espacios (si no se puede mantener la distancia) o situaciones (síntomas compatibles con infección respiratoria), con la ventilación de ámbitos interiores y la higiene de manos para evitar contagios, sobre todo en el entorno de personas vulnerables.